El 25 de enero de 1985, docenas de los músicos más populares de la época se reunieron en Los Ángeles para grabar un sencillo benéfico para el alivio de la hambruna en África. Dejando de lado los egos, colaboraron en una canción que haría historia. El documental transporta a los espectadores de vuelta a la grabación de ‘We Are the World’, capturando un momento seminal en la música con detalle emocionante y emoción. A través de una lente íntima, la película crónica la noche cuando algunos de los nombres más grandes de la industria musical se unieron por una causa mayor que ellos mismos.
Con material exclusivo detrás de escenas, entrevistas sinceras con los artistas involucrados y percepciones de historiadores de la música, el documental revela los desafíos, la camaradería y el puro talento que convergieron para hacer de la sesión de grabación un evento sin paralelo en la cultura pop, convirtiéndolo en un recordatorio conmovedor del poder del arte para efectuar cambio.

Para reclutar actores para sus ensayos, Nathan abre un estudio de interpretación en Los Ángeles, en el que enseña el 'Método Fielder', que consiste en observar e imitar de forma encubierta a sujetos inconscientes. Sintiéndose inseguro de su propia actuación, Nathan recrea la clase con actores y un falso Nathan como profesor, mientras el verdadero Nathan interpreta el papel de Thomas, un alumno. Nathan hace que sus alumnos se sumerjan en la vida de otras personas mientras él se sumerge en la vida de Thomas, incluso viviendo en su casa.
Nathan regresa a Oregón, donde su 'hijo', Adam, es ahora un adolescente. Nathan y Joshua, el actor que interpreta a Adam, deciden que éste incube un resentimiento hacia su padre ausente y desarrolle un problema de drogas, una situación que refleja el propio pasado de Angela. Adam sufre una sobredosis y es atendido por los socorristas interpretados por Thomas y otro graduado del Método Fielder. Después de huir de casa, el Adam de 15 años vuelve a ser un niño de 6, ya que Nathan planea revivir los primeros años de su hijo.

El Mundo en Moto Rumbo: Norte muestra el relato de un grandioso viaje en el que Ewan McGregor y Charley Boorman recorrerán 13 países de Sudamérica y Centroamérica, desde Ushuaia en el extremo del continente hasta Los Ángeles, cubriendo casi 21.000 kilómetros, por parajes impresionantes y casi desconocidos. Las motocicletas que utilizan son prototipos eléctricos diseñados expresamente para su travesía. Además, el equipo de producción que les acompaña también utiliza novísimos SUV eléctricos, en un claro compromiso con el medio ambiente.
En el primer episodio Ewan McGregor se reencuentra con su mejor amigo, Charley Boorman, para evaluar qué es lo importante en sus vidas después de un terrible accidente de Charley. Deciden emprender una nueva aventura en moto y se disponen a planear su viaje.

Ewan McGregor y Charley Bormann están cerca de completar su periplo. Hay discusiones sobre la seguridad, porque atravesarán regiones dominadas por cárteles peligrosos. Deciden emplear un autobús para viajar y transformarlo para albergar las motos dentro. En tiempo record, el equipo acondiciona y repara un autobús de saldo y reemprenden su trayecto. Cerca de los Estados Unidos retoman sus motos, pero tienen que esperar 12 horas de cola para superar su último cruce de fronteras.
Realizan el tramo final a Los Ángeles, donde los esperan familiares, amigos y seguidores, que forman una caravana triunfal hasta la llegada a su punto de destino. Lo han conseguido, han terminado 'El mundo en moto: Rumbo norte', toda una proeza. Entre saludos efusivos y celebraciones, se pone un emocionante punto final al increíble viaje realizado por Ewan, Charley y su equipo.

Todas las noches, las ciudades del planeta iluminan la oscuridad. Sus luces brillan más que nunca. Mientras dormimos, los animales aprovechan al máximo el paisaje de neones. Tras la puesta de sol en Los Ángeles, Chicago y Toronto, surgen múltiples oportunidades para los animales más avispados dispuestos a arriesgarse.